Hoy es el primer día de diciembre y como siempre… ¡no, no! Nunca escribo en esta época porque me da pereza, o no tengo tiempo, o vemos películas navideñas. Hoy será lo mismo (como en la película navideña), porque no puedo hacer nada, porque ayer me sacaron mi primer diente (espero que los otros dientes se queden conmigo para siempre) y el médico me dijo que no saltara. mucho durante unos días, porque será malo. De todos modos, nada extra, por mucho que temía, no pasó nada, a pesar de que este diente era una pequeña basura rebelde, una verdadera raíz. Ja ja. Nuestro médico es el mejor del mundo, eso es seguro. Todo el tiempo estuve pensando en lo que podría pasar, porque estábamos sentados en silencio y yo seguía un punto negro que nadaba frente a mis ojos. Entonces el doctor me dijo que abriera los ojos, porque ahí es donde se ven las cosas más rápido, así que si es posible no debería dormir. No estoy mintiendo, lo fue. Pero no quería escribir eso, sino algo más...
La historia comienza con el hecho de que hace mucho tiempo que no tengo ganas de tomar fotos. O a veces lo es, a veces no, pero no es real. Ya no es como solía ser. Luego Adri dijo que no cree que tenga ningún desafío en lo que hago o no hago, y que por eso soy un idiota. ¡Y qué razón tenía! Empecé a observarme a mí mismo, a qué estaba reaccionando. Luego vimos la película Pobres (Yorgos Lanthimos) y simplemente no pude recuperarme. Siempre me han encantado las películas de este director, pero ahora simplemente me hipnotizó. ¡Todo fue mágico para mí! ¡El decorado, el vestuario, los actores! ¡Finalmente tengo algo para usar la palabra genio! Pero el punto es: las lentes. Utiliza con maestría la lente ojo de pez, poco vista en este mundo. Generalmente ahí es donde la gente se queda atascada, que es un árbol en el planeta o algo así. La persona a quien se lo compramos hizo lo mismo, así que terminé con una pieza nueva maravillosa, no barata, pero al menos no estaba hiperventilando por el precio. Entonces ahora comencé a experimentar con dos cosas. Una es la lente antes mencionada. Lo otro...y aquí viene lo artificial o natural en el título...qué más: luz. Ahora tengo luces y hasta un flash, por el que siempre se me hacía babear. Por eso siempre debes informarte de los mejores lugares, no de los peces gordos de los grupos DSLR, porque fácilmente puedes pensar que en fotografía todo es una mierda. De todos modos, esto es cierto para todo. Y no, no soy un snob, no soy un intolerante. Lo mismo dirán en la escuela. ¡Experimenta, practica, ten esto en cuenta incluso en tus sueños! He vuelto a lo básico ahora. Tengo suerte porque ya tengo la columna vertebral del proceso, sólo me falta recuperar los recuerdos. Por cierto, quien diga que la escuela es una estupidez: ¡NO LO ES! Historia del arte, historia de la fotografía, conceptos básicos técnicos, todos estos son necesarios y puedes desarrollarte más desde aquí. Bueno, si no quieres dedicarte al arte, entonces el grupo DSLR será bueno. Perderás el interés en todo lo que hay allí para siempre. He leído mucho sobre la educación superior. Hay artistas que apuestan por ello y hay quienes no (este último tiene su propio estilo, a los demás los reconozco por donde terminaron).
Tomé las siguientes fotografías recientemente. Obviamente todavía estoy experimentando, y tú siempre experimentas, ¿verdad? Cuando no es así, llega el aburrimiento. En estas imágenes se ve claramente la diferencia entre la luz natural y la artificial. También cambiar las lentes, lo cual también es muy emocionante. Me encantan las formas ligeramente extrañas, para las que los de 15 y 8 mm son el compañero perfecto. Sé que mucha gente no lo hace. Y sé que no a todo el mundo le gustará lo que hago, ese no es mi objetivo, pero que por fin pueda volver a ser feliz cuando pienso en fotografía.
Bueno, aquí estamos ahora. Estoy muy agradecida a mi esposo por ayudarme, apoyarme, construir los fondos y limpiar las ruinas al final. Un agradecimiento especial a Reni por dejarme desollarla y no decir una palabra sobre los accesorios. A Patrik, por sacrificarnos un domingo para hacernos peinados, y por último, a mi gato, por soportar estas horas horribles debajo de la cama y en la lavadora detrás del cesto. Y gracias Yorgos, que a ti tampoco te importa que 9 de cada 10 personas apaguen la tele cuando ponen tu película. Me alegra que haya, haya y habrá artistas que valoren las opiniones de los demás. Sin vosotros todo sería gris y en los museos sólo habría latas de cerveza. Beso
